"El cielo de mi tierra" (modelado)

Muy buenas tardes, amigos/as:


Inauguramos este mes de marzo con la publicación de un nuevo trabajo. Se trata de un relieve realizado en terracota roja, llamado "El cielo de mi tierra".

Sus dimensiones son de 26 x 53 cm. Representa una alegoría a mi Jaén, conocido desde antiguo como la "ciudad del Santo Reino" por albergar en nuestra Catedral - tesoro pétreo que debería ser declarado Patrimonio de la Humanidad - la reliquia del Santo Rostro, de la que se decía era el paño que contenía el verdadero rostro de Nuestro Señor Jesucristo.


Sin más dilación, comienzo con la presentación del boceto previo, realizado en bolígrafo negro sobre papel en 2.010.

"Vera Icon"

(Estudio para relieve escultórico)

Bolígrafo monocolor sobre papel de impresión.

22 x 30 cm.

2.010.

Esta fue la idea primaria para la consecución de la presente obra. Simplemente, la realicé para algún día poder llevarla a cabo... y cuatro años después la he llevado a la materia

Refleja el cielo de Jaén, donde se guarda la reliquia sagrada por la que comenzó la vida cristiana en mi tierra, reinando desde el cielo, entre nubes, iluminada por haces de luz, acompañado por tres querubines pasionistas.

El paño donde se muestra el Santo Rostro sirve como dosel, como clámide de Pasión a la que alude, como capa de un rey. Está sostenida por la boca de un querubín rebosante de paz, como el ser privilegiado que ha conocido a Dios y que no necesita nada más que a Él, obedeciendo a lo descrito por santa Teresa de Jesús: " [...] Quien a Dios tiene, nada le falta; sólo Dios basta [...]".  Porta los tres clavos de la Crucifixión del Salvador.

Tras la tela del Redentor, dos cintas con las inscripciones "VERO" e "ICON", indicándonos que es en Jaén donde, por tradición, se guarda la auténtica "Verónica" que recogió la imagen impresa del Rostro del Señor Jesús.

Los otros dos querubines también llevan sendos elementos de la Pasión de Nuestro Señor: el de la izquierda, una cinta con las siglas "I.N.R.I" ( Iesus Nazarenus Rex Iudaeorum)., el cual gira su perfil y dirige su mirada hacia el Rostro de Dios, para admirarlo y mostrar su respeto , mientras que el otro se muestra compungido por el sufrimiento pasional de Nuestro Señor para nuestra salvación, y porta, aunque dejándolas caer, unas tenazas para extraer los clavos del Lignum Crucis.

Hasta aquí, la presentación de este trabajo. Me despido de vosotros/as con una serie de tomas que iba haciendo con el móvil mientras comenzaba la obra hasta la conclusión del modelado. Próximamente, os la mostraré totalmente terminada.

Espero, como siempre, que este nuevo trabajo sea de vuestro agrado. Os agradezco de nuevo vuestras visitas. Un abrazo muy grande, que Dios os Bendiga y la Santísima Virgen os proteja por siempre.